Juego de forros de frenos de camion y camioneta

Los forros para las zapatas de freno son elementos de fricción duraderos que entran en contacto directo con el tambor y sirven para detener el vehículo en cualquier situación. Están hechos de materiales compuestos y tienen forma arqueada. Van unidos a una placa metálica, la denominada zapata. Su curvatura interna sigue la línea de la cuña, mientras que la curvatura exterior sigue la forma del tambor.

Según la tecnología con la que se fabrican:

• Prensados en frío. Son baratos y su vida útil se encuentra entre 60 mil y 80 mil kilómetros.
• Prensado en caliente. Tienen un precio y una vida útil más larga (entre los 90 y los 100 mil kilómetros).

Los forros de fricción se pueden sujetar a las placas o platos de freno de dos formas:

• Mediante un adhesivo. Es un tipo de unión menos fiable, por lo que suele ser encontrada principalmente en vehículos comerciales ligeros.
• Con remaches. Es el tipo de unión diseñada para soportar cargas pesadas.

Dadas sus peculiaridades de funcionamiento, tanto los forros para las zapatas de freno de tambor de la parte delantera como trasera se encuentran sometidos a cargas importantes. Teniendo en cuenta el rápido desgaste natural, los fabricantes ofrecen la posibilidad de instalar un juego de forros de manera separada a las placas de metal.

El ajuste incorrecto del mecanismo de frenado es una de las razones más comunes de un desgaste irregular o prematuro de los componentes del sistema de frenos. Si el hueco entre las zapatas y el tambor es inferior al requerido, existe la posibilidad de que se produzca una frenada espontánea. Esto aumenta el riesgo de sobrecalentamiento de los componentes y reduce sus propiedades de fricción.

También es perjudicial para los componentes sobrecargar el vehículo constantemente. Debido a esta sobrecarga, los componentes del sistema de frenado sufren excesivas cargas mecánicas y térmicas, pudiendo dar lugar a la formación de mellas y grietas en su superficie.

Es necesario prevenir la entrada de aceite y de otros líquidos de trabajo en la superficie útil de las zapatas de freno. Esto se podría traducir en deslizamientos, reduciendo la eficiencia de frenado.

El elemento de fricción puede ser arrancado a veces de la placa metálica. Normalmente, esto ocurre cuando se instalan componentes de una calidad inferior a la estándar o en caso de haber realizado un remachado de manera incorrecta.

El tambor de freno incorpora unas ventanas especiales, cerrada por una tapa, para la comprobación visual del estado de los componentes. El espesor de los elementos de fricción puede ser medido a diario con un calibrador vernier. En algunas ocasiones, los componentes vienen equipados con sensores de desgaste. Cuando su espesor alcanza el mínimo, el sensor envía una señal al panel de control del salpicadero.

El desgaste de la superficie de fricción del forro también suele venir indicado por otros síntomas indirectos: chirridos y sonidos de traqueteo durante la frenada, desviación de la trayectoria o el aumento de la distancia de frenado. Si aparecen estos síntomas, se debe revisar y diagnosticar todo el sistema de frenos.

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